Chargers 27 – 17 Titans
Algo de lo que vimos en el triunfo frente a Tennessee:
Justin Herbert Liderando el Camino
Aunque los números no mienten y siempre ofrecen un contexto importante, no cuentan toda la historia.
La historia es que estamos viendo en carne propia el desarrollo de quien está llamado a convertirse en uno de los mejores mariscales de campo en la historia de la NFL. Estamos viendo la importancia de contar con un coach en jefe como Jim Harbaugh y la relación que ha forjado con su QB. Estamos viendo la evolución al siguiente nivel de Justin Herbert.
"Justin estaba haciendo algunas [cosas] que nunca había visto... No sabía que tenía eso en su arsenal", dijo Khalil Mack.
"Jugador especial," añadió Mack. "Lo ves en el juego hoy. Dice mucho cuando tienes un líder como ese."
No hay dudas de que el numero 10 está atravesando por su mejor momento de la temporada. El formado en Oregon completó 14 de 18 pases para 164 yardas y un TD. Además, agregó 32 yardas por tierra en nueve acarreos (su mayor cantidad de acarreos para la temporada) y registro un QB Rating de 123.1.
Nuevamente no tuvo intercepciones (ya van siete partidos seguidos sin una), acercándose a la marca para la franquicia de mayor cantidad de pases completos sin intercepción (233, fijada por el mismo entre diciembre del 2022 y octubre del 2023).
"Voy a cambiar su nombre a 'Bestia.' Bestia Herbert," dijo Harbaugh después del partido. "Mitad hombre, mitad bestia."
Ante Tennessee (2-7) entró con 192 y salió con 206 pases completos sin intercepción. Además, Herbert ahora tiene el récord de mayor cantidad de completaciones por aire en sus primeras cinco temporadas en la historia de la NFL con 1,766 (superando la marca anterior de 1,759 impuesta por Derek Carr).
Ya lo había anticipado el coordinador ofensivo Greg Roman, que mientras más saludable se sintiera Herbert, más acceso tendría el equipo al libro de las jugadas de ataque, porque la capacidad para correr de Herbert es una parte clave de lo que puede hacer esta ofensiva, y ante Titans estuvo en el centro de varias de las jugadas más determinantes de la victoria.
"Es una gran parte de nuestra ofensiva, donde estás leyendo y tratando de empujar el balón por el campo," dijo Herbert. "Si la defensa está jugando una buena cobertura y los muchachos están cubiertos y la presión aumenta, tienes que ser capaz de romper la contención y hacer que algo suceda."
Haciendo pasar de largo al defensor que haya sido que lo salió a encontrar. Liniero, linebacker o esquinero, no importó. Tal como en cuarta y una con menos de dos minutos por jugarse en el segundo cuarto, cuando tras un tiempo muerto, Roman decidió que fuera el propio Herbert el que terminara la ofensiva corriendo para cuatro yardas y la anotación.
"Había muchos muchachos desbloqueados y él simplemente se puso en modo bestia para llevar el balón a la zona de anotación," dijo Harbaugh.
Hassan Haskins agregó: "No sé cómo lo hace. Pero hace que los muchachos fallen. Hoy lo metió en su bolsa de herramientas."
De ahí en más los Chargers (6-3) no volvieron a soltar la ventaja. Herbert no solo se ve certero y eficiente, haciendo gala de todas las herramientas físicas que lo hacen ser casi el prototipo perfecto del QB moderno. 6 '6" de estatura, 240 libras de peso con una agilidad que no es normal para alguien de esa envergadura y para muchos, el mejor brazo de la liga.
Pero hay algo más que estamos viendo con el número 10. Está disfrutando liderar a este equipo, tal vez como nunca antes lo había hecho en su carrera. Hay un nivel de energía distinto alrededor de Herbert y los Chargers. Lo sienten sus compañeros de ofensiva, pero también la defensa y los equipos especiales. Lo ves al final de sus carreras y lo ves en los pases que a menudo completa con sus receptores. Algo está cambiando en Herbert.
El ganar tres partidos al hilo seguro que tiene que ver con este momento pero, hay algo más, y cada partido que pasa se hace más evidente. Por cosas así es que decides tener un entrenador como Jim Harbaugh. Estamos siendo testigos de la siguiente etapa en la carrera de quien está llamado a conducir los destinos de la franquicia por la siguiente década y más.
Y recordar que, Herbert apenas tiene 26 años y está jugando su quinta temporada en la NFL.
"Es bueno tenerlo de nuestro lado," dijo Daiyan Henley. "Es un jugador muy dominante y espero que la liga lo reconozca."
Gran Partido de la Línea Ofensiva
11 jugadas, 95 yardas y 7:10 minutos consumidos en el cronómetro. Así es como congelas un partido y así fue como los Chargers comenzaron el último cuarto.
Solo una jugada de esas 11 fue de pase, 37 yardas para Ladd McConkey. La ofensiva terminó con el TD de una yarda de Hassan Haskins que les daba una ventaja de 27-10. Todo lo demás fue por tierra consumiendo el cronómetro.
"Eso los desmoraliza. Estaban agotados," dijo Rashawn Slater. "Nos reunimos en la zona roja y miras hacia allá. Están resoplando y resoplando y sabes que los tenemos justo donde los queremos.
"Y desangramos el reloj y nuestra defensa descansó," añadió Slater. "Esos son todos los Chargers."
Así se ve una ofensiva cuando te comprometes a correr el ovoide, aun teniendo enfrente a una de las mejores defensas de la NFL. Todo mariscal, no importa que tan bueno sea, necesita una línea ofensiva competente. Y ante los Titans había dudas.
La defensa visitante llegaba como el número uno en la liga en las yardas totales permitidas por juego con 269. Herbert y compañía amasaron 309 (164 por aire y 145 por tierra, liderados por las 55 de Gus Edwayds y las 50 de J.K. Dobbins). Y uno de los fuertes de Tennessee era la presión interna que generaban en la trinchera con tres hombres en particular, Jeffery Simmons, el ex-Chargers Sebastian Joseph-Day y T'Vondre Sweat.
¿Resultado? Justin Herbert terminó el partido con cero capturas. Ante uno de los mejores cuerpos de linieros defensivos en la NFL la OL del conjunto del rayo jugó su mejor partido en lo que va de temporada.
Jamaree Salyer tuvo que reemplazar al lesionado Trey Pipkins III y lo hizo en gran nivel. Había preocupación por cómo estaría la protección por el carril A y B, pero Bradley Bozeman, Zion Johnson y Salyer (quien compartió snaps con Foster Sarell) jugaron un gran partido. Por los costados siempre hay garantías con los tackles Rashawn Slater y Joe Alt.
Tal vez en ninguna jugada esto fue más evidente que en el TD de Herbert para Quentin Johnston, cuando con 3:24 por jugar en el tercer cuarto, el mariscal tuvo todo el tiempo para hacer su lectura, pasar por sus progresiones y encontrar a Johnston emparejado con el ex-Charger Kenneth Murray Jr. en una anotación de 16 yardas que ponía al equipo 20-10 arriba.
Hicieron su trabajo a la hora de abrir carriles para Dobbins y Edwards, y también respondieron cuando hubo que proteger a Herbert. Partido redondo del componente que desde febrero tanto Jim Harbaugh como el gerente general Joe Hortiz, anticiparon sería la identidad de esta nueva era de Chargers football.
Si este equipo iba a ser físico e imponer su identidad sobre los rivales, todo comenzaría con la línea ofensiva. Y ante Tennessee los cinco de enfrente fueron la unidad más dominante del partido.
"Los muchachos están jugando con energía," dijo Herbert. "Estamos entusiasmados de estar ahí y divertirnos."
Siete Capturas de Mariscal Para la Defensa del Rayo
Khalil Mack, resentido por una lesión a la ingle, apenas pudo jugar cuatro turnos. Joey Bosa, poco a poco regresando a su forma después de perderse más de un mes de actividad, jugó 20.
Aun así, la defensa del rayo produjo siete capturas de Will Levis. Dos de Tuli Tuipulotu y dos de Bud Dupree, una de Daiyan Henley, otra de Poona Ford y una más de Joey Bosa, quien de paso llegó a las 70 capturas para su carrera con los Bolts, haciéndose dueño del segundo lugar histórico de la franquicia en ese apartado.
"Cuando tienes a tus mejores [jugadores] de esta manera, debes asegurarte de dar un paso al frente," dijo Dupree. "Tenemos que asegurarnos de contar con el respaldo de K-Mack. Cada día, él pone todo por nosotros, nosotros tenemos que ponerlo todo por él."
La profundidad del plantel importa, y los Chargers pusieron una clase maestra al respecto en este partido y la verdad, lo han venido haciendo toda la temporada. Cada vez que alguien no está aparece alguien más preparado para la oportunidad de jugar.
Tuipulotu estuvo los primeros seis partidos sin registrar una captura de mariscal, pero en los últimos tres ya lleva 5.5.
"El motor y la voluntad de seguir mejorando," dijo Mack sobre Tuipulotu. "Lo vemos día tras día. Lo veo durante la semana en la práctica. Tiene todos los intangibles. El cielo es el límite para ese tipo."
Y toda la defensa ha visto un resurgir en este departamento donde como unidad para la temporada, ahora están en 31 capturas en nueve partidos.
En los últimos tres han ido estableciendo nuevas marcas juego tras juego. Comenzaron con cinco capturas ante New Orleans, siguieron con seis en Cleveland y ahora siete ante Tennessee.
"Todos juegan y hacen su trabajo," dijo Tuipulotu. "Estamos jugando juntos y suceden cosas cuando jugamos juntos."
Henley agregó: "Esto demuestra la defensa de equipo que tenemos. No depende únicamente de una persona. Pero también muestra que K-Mack es un tipo (futuro miembro del Salón de la Fama) que sabemos que tenemos que tomar el relevo si nos falta un jugador así."
Ahora se viene el partido que todos los detractores de Chargers y en específico de esta defensa, han estado esperando. Los que dicen que los números de la unidad coordinada por Jesse Minter solo son lo que son porque aún no se han enfrentado a un QB y a una ofensiva elite.
Bueno, el próximo domingo viene Joe Burrow, Ja'Marr Chase y los Cincinnati Bengals (4-6), prácticamente jugándose su temporada. En horario estelar ante los ojos del mundo NFL. La defensa del rayo también ha estado esperando este partido. Es momento de demostrar ante propios y extraños que los 13.1 puntos permitidos por encuentro no son un espejismo. Ni las 31 capturas de QB ni las nueve intercepciones. Ni que, pese a todas las lesiones, novatos se han encargado de defender las esquinas a gran nivel. Es hora de que se enteren de quién es Daiyan Henley, uno de los mejores linebackers de la NFL (lidera al equipo con 82 tacleadas combinadas, 54 solitarias) soplan otros vientos en la NFL.
Los Chargers se están convirtiendo en ese equipo que nadie querrá ver al final de la temporada.